Como llegar a floración sin sobresaltos para lograr una cosecha exitosa
El Cannabis es una especie anual y su ciclo de vida, desde la germinación hasta la senescencia, coincide con el periodo del semestre cálido del año, acelerando su desarrollo ante la disminución de la duración del día. Necesita un fotoperiodo de días alargando para crecer vegetativamente, es decir que a mayor cantidad de horas luz, va a vegetar y crecer. A medida que los días comienzan a acortarse, la planta cambia a estado reproductivo y comienza con el proceso de floración, siendo lo ideal que reciba 12 horas de oscuridad absoluta para cumplir el ciclo de floración de manera correcta. Estudios han demostrados que fotoperiodos de 14 hs. luz, retrasan significativamente la floración (Hall et al., 2014). Por otro lado, existen cultivares insensibles al fotoperiodo, llamado autoflorecientes, que florecen alrededor de 4 semanas luego de la germinación, sin importar el largo del día, incluso con 24 hs. De luz. Dado que dicha etapa está comenzando, vamos a desarrollar algunas prácticas culturales que servirán de mucha ayuda a para lograr una cosecha exitosa
A la hora de decidir cuál es la mejor manera de llevar adelante un cultivo, siempre surgen varias dudas, y entre ellas están las que refieren a podas y defoliaciones. Viejos mitos de cultivadores Old School, se han instalado como ciertos y fue costando que los nuevos cultivadores comiencen a realizar tareas culturales que ayuden y mejoren tanto la llegada a floración como la tan preciada cosecha. Hay varias prácticas que pueden realizarse al Cannabis para mejorar la sanidad y la producción, pero nosotros nos referiremos en este artículo a las podas, las defoliaciones y el uso de la red como medio de contención.
Poda:
Es la técnica más utilizada para manejar la altura de una planta, para darle forma y de esta manera poder manejar o formar la estructura de la misma. Cuando se realiza esta práctica, lo que se busca es lograr que la mayor parte de la masa vegetal quede expuesta a la luz, solar en caso de ser en exterior, o la que provine de las lámparas en caso de cultivar en un indoor. Esta mejor exposición a la luz reflejara un desarrollo de las flores más parejo lo que se traduce en una mayor producción.
El cannabis tiene dominancia apical, es decir, que hay una marcada tendencia de mostrar mayor crecimiento en la punta (o ápice ) del tallo principal, y en las puntas de las ramas secundarias las cuales no superaran nunca en crecimiento al tallo principal, un claro ejemplo son las coníferas (pinos). Al tener este tipo de crecimiento, las mayores flores se acumulan entre la zona media y la parte superior de la planta.
-Poda apical: cuando realizamos esta poda, lo que buscamos es tener “más tallos principales” para lograr homogeneidad en la producción de inflorescencias. En esta práctica se busca extraer el 100% del ápice. Este tipo de poda no solo se realiza sobre el tallo principal, sino que también se realiza sobre las ramas secundarias. En interior el objetivo de esta práctica es lograr la mayor producción con el mínimo de plantas, tratando de lograr la cobertura total del espacio de cultivo, lo que se conoce como “alfombra verde”. En exterior el objetivo es reducir la altura de las plantas, lo que ayuda a disimular más, nos da una mejor estructura para la colocación de redes y obviamente uniformidad en los cogollos. A continuación podemos ver dos imágenes, en la primera se observa cómo sería el corte del ápice y en la segunda como queda un ápice recién removido.
-Poda FIM: es similar a la anterior pero en lugar de cortar por encima del nudo, se corta una gran porción del brote pero no en su totalidad. Este tipo de poda no solo se realiza sobre el tallo principal, sino que también se realiza sobre las ramas secundarias.
-Poda en floración: durante las primeras semanas de floración las plantas crecen bastante en altura y de manera rápida, lo que comúnmente se conoce como “estirón”. En variedades con tendencia Indica, esto puede significar hasta el 50% de su tamaño, pero en variedades sativas, este crecimiento puede llegar a superar el 100% de su tamaño. Es por este motivo que muchos cultivadores continúan podando durante este periodo, lo cual no es muy recomendable porque la planta sufre un gran stress que se suma al de la transición de vegetativo a floración.
-Poda de bajos o ramas inferiores: Consiste en eliminar las ramas del tercio inferior de las plantas y suele realizarse antes de que comience la floración. A pesar de que suele hacerse en esta etapa, lo ideal es ir realizándola durante toda la etapa vegetativa, así llegamos a floración con la planta ya formada. Las ramas que se eliminan son las que producen flores de menor calidad respecto a las de la parte superior ya que no reciben la misma intensidad de luz. Otra ventaja de esta práctica, es que permite que el aire circule de mejor manera por nuestra planta evitando así el desarrollo de hongos patógenos y plagas. Otro motivo por el cual es conveniente realizarla es que los nutrientes se redireccionan hacia las ramas más productoras, lo que se traduce en una mayor eficiencia en la utilización de los nutrientes. A continuación podemos apreciar una imagen donde se muestra una misma planta antes y después de la poda de bajos.
-Defoliación: básicamente se trata de eliminar las hojas más grandes de la planta. Si bien la defoliación es una herramienta muy útil para ayudar a la planta en la etapa de floración, no lo es en la etapa vegetativa. Suelo escuchar a cultivadores decir que realizan esta práctica durante el periodo vegetativo, argumentando que a la planta le entra más luz y crece más sana y fuerte. Esto es un mito y hay que aclarar que durante el vegetativo, la planta gasta mucha energía en producir hojas que son sus “pantallas” para captar la luz, si las quitamos, tendremos menos unidades capaces de fotosintetizar. Además de ser las responsables de la fotosíntesis, las hojas también actúan como reserva de nutrientes en caso de que no pueda obtenerlos del medio.
Durante la etapa de floración, si la defoliación se realiza de manera correcta, nos puede dar muchos beneficios ya que las flores se encuentran más expuestas a la luz lo que se traduce en flores más compactas, con más resina y mayor concentración de cannabinoides. Además de estos beneficios productivos, también permite la mejor circulación de aire en la planta, contribuyendo al control de hongos y plagas. Otro beneficio de la defoliación es que el sabor es mucho mejor y las flores son menos irritantes a la garganta, esto se debe a que los últimos 25 días de floración dejamos de fertilizar a las plantas y estas consumen los nutrientes de las hojas más chicas que quedaron y los azucares en forma de clorofila que estaban acumulados en las hojas. Cuando las flores tienen menos cantidad de clorofila tienen mejor sabor. Si vamos a medir el resultado de la defoliación solamente por el peso final de las flores, tal vez, no tengamos diferencia pero lo que si vamos a tener es una flor más compacta, con mejor sabor y más resina.
En la siguiente imagen podemos ver el resultado de una planta defoliada. Al ser una imagen tomada desde arriba, podemos ver como penetra más la luz en la totalidad de la planta.
Colocación de redes:
Existen diferentes formas de sujetar las plantas de cannabis, la elección depende de cada cultivo y la que sea más cómoda para cada cultivador. Lo que sí está claro es que, es fundamental la sujeción más que nada en exterior para poder llegar a la cosecha sin daños ocasionados por vientos y tormentas. Es clave elegir qué sistema de sujeción se ajusta más a las necesidades de nuestras plantas. Para ello debemos plantearnos, principalmente, si contamos con un cultivo de interior o de exterior, en macetas o directamente en el suelo. Esto nos permitirá conocer de antemano cuál será el posible desarrollo de nuestras plantas y así elegir las mallas o redes que mejor las sujeten. Cuando las plantas son grandes y están en una floración avanzada, las ramas pesan mucho y por este motivo es necesario colocar redes de contención o sujeción. Lo ideal no es esperar a que la planta sea grande, si no, conviene colocar las redes desde temprano para que la planta se adapte a esta y de paso nosotros podemos ir guiando el crecimiento dentro de las mismas. A continuación podemos ver en la imagen un cultivo de exterior con redes colocadas, fíjense el grado se sujeción que brindan a la planta.
Concluyendo con el artículo, lo que me gustaría remarcar es que para lograr una cosecha abundantes y de buena calidad, es necesario llegar a floración con plantas fuertes y sanas. Sin duda alguna, las defoliaciones, las podas estratégicas y la colocación de redes de contención, son prácticas fundamentales a la hora de obtener cultivos sanos y de alta productividad. Con los años de cultivo y las experiencias compartidas, claro está que hay más tareas culturales que pueden realizarse y que nos ayudan a mejorar nuestros cultivos, pero nosotros nos centramos en estas prácticas que creo son los pilares fundamentales para llegar con éxito a la tan preciada cosecha.
Hola! Muy buena info!
Buena info
Buena información gracias